Protagonistas

“La película transita entre la comedia y el drama, es capaz de hacer reír y de emocionar”

“La película transita entre la comedia y el drama, es capaz de hacer reír y de emocionar”

Protagonista Adrián Suar

18.03.2025

‘Mazel Tov’, del actor y director argentino Adrián Suar, llega al Festival para contar la historia de los Roitman tras la muerte del patriarca

CARMEN ALCARAZ

¿Qué le inspiró para hacer esta película? 

Quería hablar de los vínculos familiares y cómo afectan acontecimientos como el fallecimiento de un padre, con lo que esto genera en cada persona. La historia comienza cuando Darío Roitman, mi personaje, que vive en Estados Unidos, se entera de la muerte de su papá justo cuando estaba volviendo para el casamiento de su hermana. Hacía tres años que no visitaba Argentina y nunca había tenido una buena relación con el padre, por lo que se queda con una deuda sin saldar para recomponer ese vínculo. A partir de ahí surgen los conflictos.

¿Empleó sus propias vivencias familiares?

En parte sí, pero también de gente de mi entorno, de historias que he ido escuchando… Una mezcla de varias cosas.

Al leer la sinopsis puede parecer que se trata de un drama, pero es una comedia. ¿Cómo ha balanceado estos dos géneros?

Realmente creo que la película transita entre los dos géneros sin llegar a ser ninguno. Es una comedia emocional, que parte de un hecho triste, pero sin ese final trágico. Es capaz de hacer reír y emocionar.

‘Mazel Tov’ es una expresión judía que significa algo como enhorabuena. ¿Qué importancia tiene la tradición en la película?

Yo soy judío, así que acudí a las referencias que mejor conozco y agarré dos o tres cosas de la tradición, como un casamiento o un bar mitzvah. Son momentos que suponen un vínculo de colectividad y que articulan la trama de la película.

Aunque está centrada en la relación de los cuatro hermanos, se trata de una obra muy coral. ¿Cómo ha sido dirigir a un elenco así?

No fue fácil porque, además de lo que comentas, la película tiene la particularidad de estar atravesada por seis o siete momentos de escenas largas. Así que fue un trabajo de preproducción intenso, en el que fue necesaria mucha antelación, ensayos y puestas de cámara. Fue necesaria mucha concentración para no perder el humor y lo emocional. Por ello quise armar un elenco en el que tuviera confianza, con actores y actrices que conozco desde hace años y que me pudieran ayudar con su actuación a pasar todas esas escenas largas que requieren muchos estados distintos. Y bueno, lo logramos.

Además de ser el director, usted es uno de los protagonistas. ¿No sabe delegar?

Es un proceso fuerte, pero me gusta mucho. Además soy productor y he estado muchos años en esto, conozco el sector. Esta es mi segunda película tras ’30 noches con mi ex’, y la experiencia ha sido muy buena en ambos casos.

¿Hay algún aprendizaje de esa ópera prima que haya incorporado a este segundo trabajo?

Sí, ha sido un aprendizaje muy fuerte, sobre todo de entender mejor el proceso de rodaje, lo que me ha ayudado a estar más tranquilo y cómodo en los dos lugares. Me preparé mucho para afrontar este desafío, saber bien qué tipo de lentes quería usar o elegir la luz junto el director de fotografía, Guillermo Nieto. Y creo que ha salido todo muy bien, estoy muy contento con el resultado.

Es su primera visita al Festival, ¿qué espera que suceda en la sala? 

Espero que la gente que vaya pueda hacerme una devolución honesta de lo que le parece la película. Ver cómo reaccionan. Para mí va a ser un desafío enorme estar ahí y es algo que me genera mucha intriga.