"Un festival necesario, útil y sólido"

El cartel de esta 27ª edición, obra del estudio malagueño Narita, define a la perfección nuestro Festival de Málaga, porque en él se ve reflejada una arquitectura cultural de vanguardia, que es firme; una estructura que recuerda al armazón que necesita la cultura para ser sólida. Y esa es nuestra apuesta: un festival necesario, útil y sólido en su modelo -porque su diseño está detalladamente estudiado y planificado- y sólido en sus cimientos -porque cuenta con el apoyo del sector, de las instituciones (con nuestro Ayuntamiento al frente) y de los patrocinadores que lo sustentan y a los que año a año agradecemos su firme apuesta. 

El Festival de Málaga es hoy el festival de referencia del cine español. En nuestro abrazo al cine iberoamericano, hemos abrazado aún más al cine español porque hoy día ambos forman un ámbito único y unido. Podemos decir ya, sin miedo a equivocarnos, que aquella buena idea es hoy una realidad que nos llena de orgullo, que redondea y da más sentido a nuestro concepto de utilidad.

Pero también somos un festival que, más allá de la imprescindible exhibición de películas, se ha convertido en epicentro de la industria cinematográfica española y en español con un proyecto de tanta envergadura como son los Spanish Screenings, el mercado oficial del cine español, que volveremos a celebrar en esta edición. Nuestra área de industria MAFIZ ha cosechado un gran prestigio en nuestro afán por acompañar al audiovisual en toda su cadena de valor, específicamente en su venta y posicionamiento internacional. Algo que requiere de un esfuerzo logístico y de producción enorme porque Málaga se ha convertido en ventana privilegiada para la llegada del cine iberoamericano a Europa.

Afrontamos así una nueva cita con nuestro festival, con el cine y con la felicidad del reencuentro con la cultura. Porque la cultura es el espacio de confluencia de todas las artes creativas como también lo es el cine. Así lo demuestran los trabajos que veremos en esta edición, marcados por la interdisciplinariedad, el talento y la creatividad de este sector. Un cine que, en un mundo tan convulso como el que vivimos, parece volver a hablar de la comedia, de la necesidad de sonreír. Y nuestro festival será celebración del cine y de la alegría. Os invito a vivirlo así durante los próximos días y a hacer vuestro ese lema que nos acompaña en todo lo que hacemos: la cultura es alegría. Celebrémosla juntos.